Ven a beber sin prisa
donde saciaras tu sed
conoces el camino,
para llegar al agua fresca
donde se confunden los sentidos
y se agotan las fuerzas.
Sumerge tu boca
como si te recostaras sobre la hiedra,
y abre los labios
como cuando me besas,
y me quedo quieta.
La miel es dulce como tus manos
cuando me aprietas
inagotables sensaciones
se mezclan en la cima
donde permaneces y tiemblas.
Busca lo que deseas
y baja muy lento donde te plazca
los cantaros están llenos
de la miel que fluye
cuando me abrazas.
Marcia Sevilla (Chile)
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Muy bonito poema, con una sutil sensualidad. Felicitaciones!
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