¿Cómo negar que
esta soledad me agobia?
Que el alma me
grita y me hiere,
que al mirar tus
ojos, dejo mi aliento.
que el corazón se
exalta y las horas
se adelantan.
¿Cómo negar que esta soledad me agobia?
Que el aire me
falta, que el sonido de mis
lágrimas al caer
se vuelven mares,
que no hay caracoles en las montañas.
¿A quién se puede
engañar?
Si todos saben que
el Arcoíris no es eterno,
que el aquí y el
ahora, no son nada sin ti,
me siento sólo e
inseguro,
no quiero pensar,
no quiero ser,
y el mismo ser me
devora.
¿Quién es el que
es? ¿Y quién soy yo?
Tu ojos, tu piel
de alabastro,
tu caminar, tu pelo,
todo y nada.
No quiero ver, los ojo me matan,
me engañan, me
hieren y aún así,
sigo por el camino
del recuerdo.
Tu figura se ha
plasmado en mi mente,
se funde y se
enclaustra,
aún cuando cierro
los ojos,
mí mente te tiene.
Hermosa figura,
fina y galante, pero distante,
camino y corro,
corro y camino.
figura de hielo,
figura distante,
fuego en el aire,
gloria en el Hades.
Abro los ojos,
cierro la mente,
corro a la muerte
y no esta distante.
Miguel Salvador Rodríguez Azueta
Veracruz, México
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