miércoles, 25 de septiembre de 2019

CADÁVER EXQUISITO - RED POETAS DE VERACRUZ




Red Poetas de Veracruz
Veracruz, México

ser el viento del norte con perfumes a gardenias
ser el aire que acaricia la dulce piel de los ríos
los sentidos corporales anhelan ser parte del todo
Los sentidos irreales saturan la nada
Saturada de cielos interminables plenos de luces.
Luces que nacen del alma e iluminan las vidas...
Los sentimientos en sus tonos encendidos
Encendidos como besos escondidos...
etéreos y frágiles como alas de mariposas
con el perfume de las rosas salen los besos de su nido.
Gardenias
Luces, Besos, Mariposas, Rosas
Aromas... brillos... aire…
Aleteo impregnado con el brindis de tantas ocasiones
Colores, alumbran en la noche, alfombran los sentidos: con estallidos de Luz.
Luz creando ilusiones, amantes etéreos entregando corazones...
Luz tenue, lágrima de vida, sangre de amantesidad de un amanecer
Amanecer exquisito,
de goces inconfesables,
voces sofocadas por el amor...
Hasta que brote el alba embriaguémonos de estrellas.
Estrellas etéreas, convertidas en cometas
Eolo enamorado del perfume de tus flores, labios taciturnos en el beso del viento, y toda tú amante de tormentas y del mar en remanso.
Arrasando tu cuerpo, robando tu esencia

miércoles, 18 de septiembre de 2019

ABANICO NEGRO - RAMÓN DE JESÚS HERNÁNDEZ OLIVARES






Ramón de Jesús Hernández Olivares
Veracruz México


Tu finura galante hecha de sueños
para esconder coquetería ambulante,
damas ocultas en el velo
que solo cubren su rostro
mientras se lee un misal,
quedo, muy quedo.
Esconderás dolores ajenos o risas de intriga
en un baile de dolor, repugnante.
Negrura de noches
vestirás con estrellas
de abalorios orientales.
No seas coqueta acariciando rostros
e invitando a placeres
del Marqués de Sade.
¿Llora la dama al joven galante?
que embriagaste de amor
y placer desahuciante,
a un ritmo frenético que despojó
tu fino ropaje.
Ahora caminas lento muy lento,
búsqueda de gallardos gendarmes
para ocultar en la obscuridad
de tus plumas y encajes,
y robarles íntimos instantes.
Detrás del cristal de tu carruaje
mientras tus esclavos
lanzan al pozo a tu amante
ríes, suspiras
detrás de un abanico negro
de finos encajes.

En Memoria de la Condesa de Malibrán, leyenda de la Ciudad de Veracruz, México
del poemario  Musas Prohibidas